https://www.soberaniaalimentaria.info/images/estudios/RDC_MIneria.pdf
Si consideramos su posición geoestratégica, con gran cantidad de recursos naturales y minerales (60 % de las reservas mundiales de cobalto, el 10 % de cobre, el 80 % de coltán; el 60 % de las selvas africanas, una enorme fertilidad de los suelos o importantes ríos con un excepcional potencial hidroeléctrico, etc.), es fácil entender que los países occidentales, las multinacionales, y más recientemente China, lo hayan considerado como un gran pastel para repartirse, aunque ello haya supuesto dejar un rastro de violencia, saqueo y sufrimiento humano.
LA RDC, desde la época colonial, ha sido una zona de sacrificio para satisfacer las necesidades del norte global. Se inició con el esclavismo, continuó con el caucho, más recientemente con el coltán para nuestros móviles y ordenadores y ahora con el cobalto, un mineral imprescindible para la producción de energías renovables y la fabricación de baterías.
En este estudio, con el apoyo imprescindible de la organización Afrewatch, queremos evidenciar el impacto humano, social y económico que sufren estas llamadas zonas de sacrificio para hacer posible la transición ecológica de los países del norte con energías supuestamente sostenibles.
Para ello, desvelamos lo que hay detrás de la extracción del cobalto en el territorio congolés con más reservas de este mineral y hacemos un breve repaso de la historia minera de este país. Evidenciamos que, a pesar de disponer de un marco normativo para la explotación de recursos mineros, no hay un control de las condiciones sociales y laborales de las personas, adultas y menores, que trabajan en las minas. Asimismo, nombramos los principales grupos industriales del sector.
Para finalizar, exponemos los resultados de cuatro estudios de caso realizados por Afrewatch que evidencian y denuncian el impacto que provocan las empresas mineras: expulsión de comunidades campesinas, apropiación de tierras, contaminación de agua y suelo, problemas de salud, precariedad laboral o amenazas a los líderes comunitarios y defensores de derechos humanos, entre otros.
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