Podemos estar de enhorabuena, los compañeros de la editorial Las siete entidades
acaban de publicar este trabajo riguroso e impecable de Marisol Caldito
sobre uno de nuestros pintores más olvidados: Julián Pacheco. Un
compañero al que algunos descubrimos apenas hace unos años cuando se
publicó en Bicel
un pequeño trabajo sobre él y se reprodujeron sus obras en la citada
revista. Julián Pacheco, nacido en plena guerra de España, cansado del
mortecino ambiente cultural del país y la censura imperante, se exilió
primero en París y después en Italia, país en el que vivió hasta bien
entrada la democracia en España y donde, al contrario que ocurre aquí,
es un pintor reconocido, valorado y estudiado. Extraño absurdo que,
como nos desvela Marisol Caldito a lo largo del libro, no es casual.
En
efecto, Julián Pacheco cumplió con todos los requisitos de nuestros más
afamados pintores de vanguardia de los años sesenta y setenta, es
decir, vivió en Madrid y Barcelona, participó de la renovación plástica
del informalismo, conoció e hizo amistad con los hoy afamados Tapies,
Arroyo, Equipo Crónica, etc., expuso con ellos dentro y fuera de España
pero, como decíamos, al contrario que sus compañeros de viaje, Julián
Pacheco fue siempre un proscrito, un pinto al que, por no estar
dispuesto a comulgar con el régimen de la transición, se le cerraron
todas las puertas de la fama y la gloria mediática e institucional.
Marisol
Caldito recorre en este libro los hitos vitales del pintor conquense,
sus idas y venidas por la segunda mitad del siglo XX, ahondando con
lucidez en su obra que, bebiendo de las vanguardias históricas, sobre
todo del surrealismo y la abstracción (Klee, Miró, Picasso, Dalí), y de
los nuevos realismos europeos (Dubuffet, Vostell), supo elaborar un
discurso plástico tan personal como incómodo.
Aunque
Julián Pacheco quedará ligado a la memoria libertaria por sus muros de
grafitis, Marisol Caldito nos descubre un inmenso panorama plástico que
recorre desde sus obras más abstractas hasta las más figurativas,
dotadas estas de un realismo crítico, de denuncia, con la que si bien
triunfó en Europa nunca tuvo aceptación en una España que no solo quiso
estrenar democracia tras la muerte del dictador, sino que también, como
muy bien nos cuenta Marisol Caldito en este libro, estrenó olvido,
desmemoria, pactos de silencio en torno a su origen, su constitución y
su presente, construido sobre una postmodernidad que exaltaba la
banalización del arte, la mercantilización de toda la vida social, la
podredumbre institucional y la corrupción política más soez. Un contexto
que hoy se nos antoja pavoroso pero que explica que nuestro anarquista
de los pinceles y la crítica acerada, nuestro Julián Pacheco, solo
cosechara incomprensión y rechazo.
Sobre
esta y otras paradojas de la vida de Julián Pacheco, además de realizar
un profundo estudio crítico de su obra, nos habla Marisol Caldito en
este primer gran acercamiento a la obra de un compañero que, como tantos
otros, pagaron su coherencia vital y su posicionamiento ideológico con
la omisión, la censura y ninguneo de la cultura oficial española.
Año publicación: 2014
Autor / es: Marisol Caldito Aunión
Editorial: Las Siete Entidades
ISBN: 9788494187421
Páginas: 213
Tamaño del libro: 23x17
No hay comentarios:
Publicar un comentario