Cuando la multitud hoy muda, resuene como océano.

Louise Michel. 1871

¿Quién eres tú, muchacha sugestiva como el misterio y salvaje como el instinto?

Soy la anarquía


Émile Armand

lunes, agosto 29

Matrimonio, familia y estado: escritoras anarco-feministas en la Revista Blanca (1898-1936)

Libro

Antonio Prado

El presente estudio tiene como enfoque los textos literarios y culturales producidos en España durante el período de entre siglos y la Guerra Civil española (1898-1936), particularmente, los que plantearon nuevas formulación es ideológicas en torno a los paradigmas de genero, clase y Estado. La corriente cultural por excelencia que logró abordar simultáneamente estos paradigmas fue el anarquismo, y más concretamente, el anarco-feminismo. Los autores representativos de estos textos fueron, en su mayoría, escritoras que dieron a conocer su voz a través de mediaciones culturales de la cultura popular anarquista, como periódicos, panfletos y revistas. El estudio se centra en una de las principales editoriales anarquistas, La Revista Blanca. Son de interés tanto las reflexiones intelectuales del ensayo político, sociológico o filosófico que la editorial publicaba desde las páginas de su revista, como la original escritura imaginativa de la novela rosa anarquista dentro de la serie de novela popular "La Novela Ideal", también publicada por la editorial de La Revista Blanca. Se presentan, dentro del ensayo, a tres de las principales y más influyentes escritoras del anarquismo español: Soledad Gustavo, Federica Montseny, y Antonia Maymón. Dentro de la novela rosa se analizan obras de Montseny y Maymón, además de otras escritoras menos conocidas, como Margarita Amador, María Solá, Ángela Graupera, y Regina Opisso.

Fundación Anselmo Lorenzo, Madrid 2011
350 págs.

viernes, agosto 26

La autoridad


En épocas remotas, las mujeres se sentaban en la proa de la canoa y los hombres en la popa. Eran las mujeres quienes cazaban y pescaban. Ellas salían de las aldeas y volvían cuando podían o querían. Los hombres montaban las chozas, preparaban la comida, mantenían encendidas las fogatas contra el frío, cuidaban a los hijos y curtían las pieles de abrigo.
Así era la vida entre los indios onas* y los yaganes**, en la Tierra del Fuego, hasta que un día los hombres mataron a todas las mujeres y se pusieron las máscaras que las mujeres habían inventado para darles terror.
Solamente las niñas recién nacidas se salvaron del exterminio. Mientras ellas crecían, los asesinos les decían y les repetían que servir a los hombres era su destino. Ellas lo creyeron. También lo creyeron sus hijas y las hijas de sus hijas.
* onas: primitivos habitantes de la Tierra del Fuego, virtualmente exterminados.

** yaganes: indios de la región de las islas australes de Chile. Actualmente habitan en la isla de Novarino, que forma parte del territorio o provincia de Magallanes.

Eduardo Galeano
"Memorias del Fuego" I - "Los nacimientos"

sábado, agosto 20

Cuando el fuego nos da la palabra (a propósito de las revueltas en U.K.)


En un mundo muerto, las ciudades en llamas anuncian que vivir es posible, y sobre-vivir superfluo.


A mediados de enero se produjo en
 Salt (Girona) disturbios protagoniza
dos por un grupo numeroso de cha
vales en protesta y solidaridad con 
otro chico que, tras una persecución policial por el robo de una motocicleta, cayó de un cuarto piso.
La manifestación realizada desembocó durante dos noches en estallidos de rabia a través de cristales rotos y el fuego en las calles. Numerosos coches, containers y motos fueron quemados. Finalmente hubo tres detenciones.
No hace falta apuntar demasiado lejos, el causante de todo ésto: el propio Estado. El capitalismo y las crisis de miseria sistémicas e inherentes a él, dónde lxs más afectadxs son siempre los pobres, siembra una vez más la cólera.
Para entender la situación se debe resaltar que la situación en Salt es compleja. El 50% de la población es
inmigrante y con muy poca pasta; este hecho ha provocado que los pequeños robos, la ocupación de decenas de pisos, así como el número de prostíbulos y drogas aumente considerablemente. Ésto ha provocado la difusión de un discurso que ha calado bastante bien entre la propia clase obrera a través de la derecha donde se incide acerca de la “peligrosidad” que supone la persona migrada que hace peligrar “su espacio”; asi como una posición,por otro lado, bastante ambigua y descafeinada de los socialdemócratas de este país.
Los mass-mierda intentan intoxicar a la población haciendo creer que el problema es la inmigración, la falta de integración, etc. El problema que radica en las desigualdades económicas-políticas de estas personas aparecen en un segundo plano o no aparecen.
Un apunte más que estaría bien recordar es que en los disturbios no sólo había población magrebí (cómo la del fallecido Mohamed). Uno de los detenidos era sud-americano.Este hecho hace reflexionar sobre las alianzas que se han forjado por un momento entre lxs más pisoteadoxs y cómo la solidaridad se ha convertido en un arma para hacer frente a las suyas.
Es imposible tras todo lo sucedido no citar a los “Banlieusards” de Francia:

“(...)No tenemos armas de destrucción masiva, no tenemos bombarderos, tan sólo algunos petardos. Pero temblad pequeños barones de Neuilly, porque hoy estamos en nuestros barrios pero de aquí unos días estaremos en la puerta de vuestras casas. La lucha que acaba de comenzar será larga, y nuestro combate es justo. La sociedad nos ha creado, lo que prueba que esta civilización corre a su fin. No tenemos nada que perder, preferimos morir rodeados de sangre que de mierda.”

Combatientes de la revuelta del Banlieu 93.

Los Banlieusards son los jóvenes que protagonizaron la revuelta en 2005 en Francia. Los Banlieu son la forma de denominar los suburbios en Francia. Estos suburbios no son pequeños barrios marginales, sino grandes ciudades que tienen pésimas infraestructuras y que conllevan al hacinamiento de millones de personas en las peores condiciones.
Estas situaciones, junto al creciente paro juvenil, el acoso policial en la zona y sobretodo a causa de la muerte de dos jóvenes de origen africano mientras escapaban de la policía resultaron la última gota para que todo se desbordase.
Estos jóvenes habían crecido entre las falacias de una cultura liberal occidental y resquicios de una cultura árabe impositiva y castradora; su familia eran sus “hermanos” y su cultura la del barrio.
Iglesias, comisarias, escuelas y muchas otras instituciones fueron atacadas a parte de centenares coches
durante todos esos días. En la prensa sólo se daban importancia y especial cobertura a los hechos dónde aparecían coches ardiendo...¿Quizás eran más fotogénicos? O ¿quizás querían evitar un cuestionamiento de otras instituciones opresoras del sistema y preferían maquillarlo como un simple ataque a lxs ricxs?
No sólo fue esa zona, la solidaridad se extendió en otras áreas de Francia como Sena y Marne, Lille, Marsella...y también otros países como Bélgica, Dinamarca, Alemania,Grecia,Países Bajos o Suiza. No sólo había inmigrantes en las detenciones, también franceses autóctonos y muchxs más aliadxs. Las inmensas autopistas que separan los suburbios de la capital francesa no fueron suficientes para llevar la revuelta más allá de dónde acontecían los hechos. Estos acontecimientos provocó que el estado francés decretara estado de emergencia y propiciara la expulsión de personas migradas.
En ese momento de rabia hacían falta más mujeres migradas que no estuvieron, ya que la cultura patriarcal seguía haciendo mella en la masculinización de la violencia.
Lo que une los hechos acontedidos tanto en Salt como en Francia son que los protagonistas no sólo son las personas migradas, sino que hay factores económicos y sociales de por medio. Son de las personas que más reciben esta miseria y por lo tanto, los que tienen más rabia contenida.
Al sistema le va de perlas revestirlo cómo una cuestión de inmigrantes; ya que el odio racial hace buscar amparo en el “Papá Estado” para que nos resuelva esa situación que nos han hecho creer que es “peligrosa”. Pero no. Los peligrosos son ellos que nos lavan la cabeza, que nos hacen tragar mierda, que nos hacen permisivos a todo lo que nos echen e incapaces y nos inculcan una cultura llena de miedo y sumisión.
Durante tiempo nos hemos visto engañados por el hecho de creernos de clase media porque podíamos ostentar a un coche, unas vacaciones o una “maravillosa” hipoteca; pero irrumpe en esta realidad una nueva situación: los millones de parados, los excluidos, los pobres, a los que obligan a agachar la cabeza como si fueran basura....pero ya están cansadxs. Lo único que hemos recibido son pequeñas migajas, pseudocompensaciones por una vida que no la estamos viviendo. Tenemos que vivir así porque nos obligan...pero...¿Y si dijeramos BASTA?
Hay gente que está viviendo a nuestra costa y nos dejamos pisar. Ahora en Salt, en Olot una persona
llevada por el odio más visceral asesinó a sus explotadores, personas que estallan y no pueden más....
Estos pequeños momentos de insurreción nos hace saborear un poquito más la libertad; debemos ir más allá de la destrucción del todo de forma instintiva y tejer una estrategia haciendo de la violencia no un fin en si misma, sinó un medio para conseguir lo que anhelamos.
Lxs insurrectxs no quieren líderes, no se dejan comprar por promesas vacías de los que ostentan el poder. No luchamos por echar a Zapatero ni, en aquel momento, echar a Sarkozy (aunque si se va,mejor, y si se muere, perfecto). Queremos recuperar nuestras vidas y no queremos que esos desgraciados jueguen más con ellas; decidir sobre lo que queremos y lo que no y que nadie nos amenace o nos premie por lo que hagamos.
Aunque el Estado cumpliera sus promesas no deberíamos dejar que siguieran controlándonos; igual que
un día nos darán pan,otro día nos echarán mierda.
Por muy bien que se portaran seguirían siendo nuestros amos y humillándonos cuando quisieran. No somos mascotas que van detrás de nadie buscando las migajas, ahora lo queremos todo y morderemos si hace falta.

Laura Punto (En veu alta)

martes, agosto 16

¿Qué es el Vaticano?

El Vaticano no es un Estado. No tiene ninguno de los atributos ni características clásicas de un Estado: Carece de territorio propio (es parte de Italia), no hay ciudadanos vaticanos (cada cual tiene pasaporte de alguna otra nación. Hasta el propio Papa viaja con pasaporte italiano), su ejército es de guardias suizos, no se le reconoce como nación en el seno de las Naciones Unidas. No pertenece ni al "primer mundo" ni al "segundo" ni al "tercero".
¿Qué es entonces? ¡Muy sencillo! Es una empresa transnacional que comercia con intangibles a futuro. Ahora que se viene señalando con índice de fuego el papel tenebroso que juegan las empresas transnacionales en el sostenimiento de gobiernos gorilescos y en el derrocamiento de los regímenes democráticos, es oportuno enfocar la atención sobre esta empresa transnacional que es el Vaticano, que no solamente es la más antigua del mundo, sino la mejor organizada. Al igual que la ITT, la Shell, la United Fruit, la Standard Oil, la Coca-Cola y todas las demás empresas transnacionales, tiene sucursales en muchos países del mundo y una pirámide de funcionarios y empleados, de diferentes nacionalidades, que le juran lealtad exclusiva. Un ejemplo de lo que significa para cualquier compañía transnacional el patriotismo lo vimos en el conflicto de Oriente Medio, en 1974, cuando la Standard Oil, supuestamente norteamericana, rehusó proporcionar combustible a la flota norteamericana del Mediterráneo, si no se le compraba al precio que ella exigía.
Las transnacionales no tienen patria, únicamente intereses. Puesto que no tienen tampoco "pueblo", están liberadas de cualquiera preocupación democrática o de co-gobierno. La organización es monolítica, con líneas verticales de mando que se inician en el vértice de la pirámide, con un presidente y una directiva, electos por la asamblea de accionistas y desciende, a través de órganos consultivos y ejecutivos, hasta los gerentes nacionales y los simples expendedores del producto. En la empresa vaticana, el "Papa" es el electo por la asamblea de accionistas (el colegio de cardenales), los gerentes nacionales son los arzobispos, los regionales son los obispos y los concesionarios para la venta de la mercancía son los curas. Pero, hablemos un poco sobre esta mercancía, porque de ahí se derivan muchas de las peculiaridades de la empresa vaticana.
El artículo que viene exportando al mundo durante los últimos dieciocho siglos es, ya lo dijimos, un "intangible a futuros". Esto no es muy raro que digamos. Los bancos, las financieras y las compañías de seguros manejan intangibles. Las acciones de la bolsa de valores, los certificados de crédito, las cédulas hipotecarias, los billetes, los seguros de vida, todos estos son valores intangibles. Se llaman así porque no podemos ver ni palpar ni usar el bien material que se supone está por el papel que tenemos en la mano. Por ejemplo, un seguro de vida, por el cual estamos pagando una prima anual, ¿qué es? Una simple promesa de la compañía de seguros de que, cuando muramos, le entregarán a nuestros seres queridos una cierta cantidad de dinero. Esta promesa es valiosa para nosotros y por eso pagamos la prima; pero no podemos tocar en este momento el dinero, ni usarlo, ni palpar los objetos materiales que pueden comprarse con él... el artículo que estamos adquiriendo es una simple promesa... es un "intangible a futuros".
El producto que vende la empresa vaticana se llama "salvación en la otra vida". Cae dentro el ramo de los seguros de vida, con la modalidad de que no ofrece pagar a los deudos sino directamente al asegurado; pero en la otra vida. El artículo no es nuevo. Fue inventado hace más de 10.000 años; pero la novedad de la patente, la marca comercial, los membretes y símbolos, registrados hace 2.000 años, le dan su fisonomía actual. El pobre inventor de estas modificaciones, como siempre sucede, murió en la desgracia. Otros se han encargado de explotarla. La venta se hace a plazos semanales, libres de impuestos, empezando desde el primer día que el niño (sin siquiera saberlo) va al centro de propaganda, que es la iglesia de su barrio, y allí deposita una monedita. Como el monto de la retribución en la otra vida es proporcional a las aportaciones (menos las deducciones por mala conducta), se deja a cada quien la libertad de decidir cuánto invierte: ¡Allá él!
El comercio de intangibles depende fuertemente de factores psicológicos. Por principio de cuentas, el cliente necesita estar convencido de que el artículo existe en realidad, aunque no pueda verlo, ni tocarlo para comprobar objetivamente este aserto. Para esto se necesita fe. Fe en la calidad del artículo, fe en que le será entregado, fe en la solvencia moral de la empresa, fe en su personal. Mientras más irracional, absurdo y raro sea lo que se promete al consumidor, más fe necesita para desear adquirirlo y la empresa vaticana, para vender su producto, ha tenido que llegar al extremo de pedir a sus clientes que tengan fe ciega; que se pongan una venda en los ojos y tapones en las orejas para no ver ni escuchar a la razón ni al sentido común. Que sean mansos corderitos y no discutan... que sólo compren, compren y compren.
En realidad, el mayor peligro para el prestigio del producto y su consumo masivo ya no proviene de otros competidores. Ciertamente, en el pasado, la empresa vaticana sostuvo guerras sangrientas contra otras negociaciones transnacionales que pretendían arrebatarle el mercado; pero es justo reconocer que, a pesar de todo, logró imponerse en Europa y establecer agencias permanentes en América. A la fuerza, desde luego. Si comparamos el artículo romano con el árabe, veremos que este último está más vistosamente envuelto con huríes, ríos de miel y leche, finas viandas y eterna borrachera. Responde a los gustos y preferencias de pueblos libidinosos y sibaritas, de temperamento ardiente. En Asia, el producto indostano se popularizó, gracias al acierto de ofrecer el pago de dividendos en otra vida, pero aquí mismo en la Tierra, no en una utopía celeste vaga y misteriosa. El inconveniente es que, desgraciadamente, la vida en nuestro planeta no es siempre agradable, aunque se encarne en un maharajá; pero a cambio de ello, la clientela de las empresas indostanas se enfrasca en una competencia desesperada por quedarse con los premios mejores, como jauría hambrienta que se pelea por un flaco hueso. A los que pierden se les ofrece la alternativa de salirse del juego y no volver más a esta Tierra. Muchos optan por esta solución. Mientras más feas se ponen las cosas en el mundo, son más los que quieren irse y no volver. La Buda & Nirvana International Corp. garantiza a sus clientes que les puede enseñar dónde está la puerta. En cuatro mil años de estar operando, nadie ha regresado para reclamar.
La empresa vaticana se ha cuidado de no exagerar sus promesas para no perder credibilidad. Aunque sus artistas publicitarios llenaron las paredes de sus casas comerciales con perspectivas celestes, pobladas de angelitos retozando entre las nubes, ahora la empresa se ha quedado prudentemente callada sobre la localización exacta del paraíso en que ofrece cumplir a sus clientes la promesa de una vida eterna de felicidad. Ya no puede sugerir que esa mansión celeste flota en la estratosfera, ni tampoco la puede situar en otro planeta o sistema solar. Niega que esté dentro de cada uno de nosotros y no se atreve a postular una cuarta o quinta dimensión; por el temor a que algún día las matemáticas lleguen hasta ahí. Simplemente calla, en espera de que los telescopios descubran una barrera infranqueable para entonces decir que el paraíso está detrás de ella y que la única agencia de viajes es el Vaticano.
No es fácil, en un mundo que cada día se desatonteja más, vender boletos de primera y turismo hacia un encantador fraccionamiento celestial situado en el "más allá"; sobre todo porque no conviene describirlo con demasiado detalle y correr el peligro de que se descubra el fraude. Ya estamos escarmentados de fraccionadores aviesos que nos muestran preciosas maquetas y perspectivas con sol, fuentes, casas que siempre parecen más grandes de lo que realmente serán y chicas en bikini con incitantes sonrisas. Cuando llegamos al lugar, resulta que es un pedregal abandonado, lejos de todo y lleno de bichos repugnantes. Por eso, la empresa vaticana deja a cada quien que se imagine su lotecito como quiera, al cabo no puede ir a cerciorarse por sí mismo. Nadie puede alegar que le tomaron el pelo, porque sencillamente esa persona ya estará muerta.
Pero, para que la demanda del producto no disminuya ante el embate erosivo de la razón y de la ciencia, para que siga aumentando la clientela del artículo intangible que se llama "salvación en la otra vida", los aboneros del más allá tienen que recurrir a las más variadas estrategias. Como todas las transnacionales, el consorcio vaticano tiene metida la mano en muchas partes: en la banca internacional, los bienes raíces, la prensa y, sobre todo, en los gobiernos. Lo hace simplemente para proteger sus propios intereses. Es obvio que si la vida en este planeta fuese agradable y feliz, desaparecería el anhelo de alcanzar una vida mejor en un paraíso hipotético.
Para que alguien desee salvarse, necesita haber algo indeseable de qué salvarse. Mientras haya miseria, habrá quien aspire a la riqueza; mientras haya dolor, habrá quienes busquen placer; mientras haya opresión y esclavitud, habrá quiénes pidan ser liberados; mientras haya injusticia, habrá quienes clamen por la justicia. Si se alcanzan todas estas cosas aquí en la Tierra, se habrá matado a la gallina de los huevos de oro. ¿Cómo hacer, pues, para perpetuar la ignorancia, la miseria, la desigualdad, la opresión y todas las demás desgracias de la humanidad sin descubrirse como enemigo de ella, sino simulando ser su salvador? He aquí el dilema que encaró, hace siglos, la empresa vaticana y cuya solución es el cimiento de su estrategia internacional. Se funda en tres principios, o pretendidas virtudes teologales: fe, esperanza y caridad.
Son tres poderosas armas, pintadas de blanco y camufladas con tanto arte que a su enunciación todos ustedes vibraron de emoción mística y ahora sentirán profunda indignación ante lo que juzgarán como sacrilegio: la demostración de que esta trilogía es el atentado más perverso que jamás se ideó contra la humanidad. Porque con la fe se anula a la razón y a la inteligencia; con la esperanza se convierte al hombre en esclavo de la casualidad, incapaz de planear, prever y calcular el futuro científicamente, y con la caridad se destruye el equilibrio sinérgico y se perpetúa la humillación, la invalidez y la miseria.
Las tácticas de los mercaderes de la inmortalidad son materia de la historia. Hablan de paz y, al mismo tiempo, instigan las guerras, bendicen las armas, distribuyen amuletos entre los contendientes de ambos bandos y se sientan a esperar para ver quién gana y entonar "te déums" en su nombre. Hablan de igualdad y defienden los privilegios de clase en los regímenes aristocráticos de explotación. Hablan de iluminación y apagan las luces del conocimiento. Los mercachifles del santo disimulo inventaron la confesión y la absolución, como medio para invalidar el sentido de responsabilidad social. Donde quiera que van les acompaña la distorsión de los valores naturales, del sentido común, de la ética y de la confianza de los hombres en sí mismos, para substituirlos por escalas de valores sobrenaturales, antinaturales, arbitrarias y ficticias, suficientemente impactantes como para dejar a los individuos sumidos en la confusión y abatidos por un complejo de culpabilidad, inducido arteramente (¡digan ustedes!, no más, ¿qué culpa tenemos de que Adán haya cohabitado con Eva?).
No hay rincón de la vida privada de los hombres donde los vendedores ambulantes de exorcismos y fetiches no se metan. Una vez acorralado su ganado, le sacan el mayor provecho posible: explotan la inseguridad que en ellos han cultivado cuidadosamente y que hace crisis en cada una de las decisiones trascendentales de la vida y ante cada evento de consecuencias imprevisibles: el nacimiento, el matrimonio, muerte, iniciación de un nuevo negocio, la enfermedad. Todo se presta para cobrar sobornos en nombre del ente que ellos colocaron en el centro del Universo para interferir caprichosamente con las leyes cósmicas naturales.
En fin, eso es el Vaticano y su gran negociación transnacional. Podemos esperar que, si no logran derrotar a la ciencia, diseñarán nuevas tácticas para seguir gozando del monopolio mundial de intangibles sobrenaturales. Ya se ostentan como caudillos de la izquierda santificada y paladines de los pueblos desarrapados del Tercer Mundo; pero no nos equivoquemos: su único propósito es conducir a los tres mundos hacia el otro mundo, mientras ellos, gracias a Dios, se quedan en éste, disfrutando las ganancias de la operación "por los siglos de los siglos, amén".

Javier Sánchez, Tierra y libertad

viernes, agosto 12

"La certeza" de Ana Pérez Cañamares


La certeza

El perro va detrás
de vuelta a casa
la pelota en la boca
niño para siempre
congelado en su docilidad.
Llega a la esquina y la dobla
sin asombro, sin duda.
Como su amo, ha aprendido
a esperar en los semáforos
a conocer el momento para cada cosa
a aceptar la realidad cortada en trozos
a tragar las convenciones de un bocado.


Ana Pérez Cañamares. Alfabeto de cicatrices. Ed. Baile del Sol. 2010.

martes, agosto 9

Biotecnología animal


LA BIOTECNOLOGÍA ANIMAL EN LA MESA

La biotecnología es la tecnología aplicada a la biología. Hoy en día se invierte mucho dinero para que se desarrolle a un ritmo acelerado ya que se ve y vende como una tecnología necesaria para poder crear recursos en una situación límite como la actual en la que el medio ambiente se agota, los alimentos están mal repartidos y se ven como insuficientes para la población mundial y las catástrofes naturales se hacen cada vez más habituales.

Una de las ramas de la biotecnología más polémicas actualmente es la cuestión sobre el consumo de animales modificados genéticamente, sean clonados (1) o transgénicos (2). Por un lado, hay dudas sobre si estos animales son seguros para comer o no, por otro lado, no se sabe la repercusión que pueden tener estas modificaciones en la naturaleza y el medio ambiente, y, más allá de las visiones
antropocentristas, no se sabe qué consecuencias tendrán estas modificaciones en los animales y cómo afectará a la evolución de la especie.

Animales transgénicos

Las nuevas versiones animales en modelos transgénicos que se están desarrollando actualmente son:
salmones que crecen el doble de rápido que su versión ‘natural’, cerdos que producen panceta baja en grasas, cerdos cuyo estiércol tiene menos fósforo y por tanto contamina menos, vacas resistentes al mal de las vacas locas... El salmón transgénico es la ‘recreación’ que puede llegar más tempranamente a los mercados ya que están finalizando los trámites burocráticos estadounidenses de la FDA (3) para poder comercializarse. Este es un paso histórico debido a que actualmente aún no hay ningún animal transgénico cuyo consumo esté autorizado. Este modelo animal, un salmón atlántico, ha sido desarrollado por la compañía yankee de Massachusetts A q u a B o u n t y Technologies. A este salmón se le ha añadido dos genes externos: un gen que pertenece a la hormona de crecimiento de un salmón mucho más grande (lo cual hace que pueda alcanzar un tamaño mayor) y otro gen ‘anticongelante’ que pertenece una especie de anguila, el cual le permite crecer cuando bajan las temperaturas (los salmones ‘normales’ dejan de crecer cuando las temperaturas son bajas). Esto hace que se tenga un salmón atlántico que crece el doble de rápido que el normal, en un año y medio (en vez de tres) alcanza el tamaño comercial.
¿Qué consecuencias puede tener este tipo de ‘recreaciones’ animales?
El animal vive más rápido porque tiene un metabolismo acelerado con lo que estamos acortando la vida de este ser por intereses comerciales. A su vez, como necesita más energía para crecer más rápido, engulle más cantidad de comida, con lo que agota los recursos más rápido. Aquí me gustaría puntualizar que aunque se diga que este pescado es de piscifactoría, el tema de los recursos afecta por igual, ya que a los peces de piscifactoría se les alimenta con peces salvajes que no consume la especie humana o con piensos hechos de estos peces u otros restos de animales varios. Finalmente, un animal que vive el doble de rápido se oxida más, sus órganos están sometidos a un estrés mayor que el que sufriría la especie original, así pues también es un tema al plantearse el de si nos interesa
consumir animales y más, si estos animales se crían o viven en unas condiciones adversas. No obstante, esta elección del ‘consumidor’ tampoco será posible en EEUU, ya que los ‘expertos’ de la FDA no se ponen de acuerdo en si hay que etiquetar o no el salmón transgénico pues, según dicen, no afectan sus modificaciones a la carne que se vende... evidentemente, evitar poner en la etiqueta que el salmón más barato es transgénico, evita que hayan reticencias en la compra. En EEUU no se etiquetan las semillas transgénicas, en Europa sí (se supone... porque se etiquetan solo si superan el 0.9% del producto transgénico), así que... ¿para qué etiquetar el salmón o lo que venga? Realmente EEUU es un gran laboratorio de ratas de ciudad en estos temas. Y para lxs que les preocupe el medio ambiente, el salmón que están ‘recreando’ los señores de AquaBounty
Technologies es una hembra estéril, con lo que si se escapasen de la piscifactoría donde están encerradas no perjudicarían otros ecosistemas porque no se podrían reproducir... eso en caso de que no muten y aparezca alguna hembra que sí que pueda hacerlo (estas técnicas tampoco son tan fiables ni infalibles como para asegurar el riesgo 0). Por otro lado, así se aseguran (como en el caso de las
semillas transgénicas) que el que cría a los salmones les tenga que comprar los huevos cada año.
Teniendo en cuenta que el consumo de pescado aumenta anualmente un 9% a nivel mundial y que ya se consume la mitad del pescado de piscifactoría (ya que el 80% de los bancos de pesca en mar abierto están sobreexplotados), ¡este negocio es muy rentable!

Animales clonados

La clonación animal es la otra pata fuerte de la biotecnología animal comercial. El primer animal clonado, la oveja Dolly, fue expuesta al público en el año 1996. Para entonces parecía ciencia ficción y su consumo ni se planteaba en un primer momento. Hoy en día, la clonación animal es una realidad y su uso se está extendiendo más allá de los pioneros científicos-empresarios estadounidenses. A principios del 2009 la administración estadounidense autorizó la venta de carne y leche de animales clonados con el respaldo de Australia y Nueva Zelanda, asegurando que son alimentos aptos para el consumo humano.
En el mes de octubre la Organización de la Industria Biotecnológica (BIO) que engloba unas 1.200 empresas, reunió en Sioux Falls, la principal ciudad del Estado ganadero de Dakota del Sur (EEUU), la elite comercial que rodea el negocio de la clonación animal: científicos, empresas y laboratorios. En esta reunión, no sólo se pusieron al día de los últimos avances en genética animal, las actuales regulaciones y las oportunidades de negocio, sino que también se mostraron animales modificados genéticamente por la industria biotecnológica, tanto transgénicos como clonados. Se mostraron por ejemplo cerdos que producen células para el tratamiento de la diabetes, además de tejidos y órganos para su transplante a humanos. Así pues, el uso de la ingeniería para producir animales que sean más resistentes a enfermedades, que produzcan medicinas para humanos o que puedan ser beneficiosos para el medio ambiente son los objetivos que exponen estas empresas para buscar la aceptación social de un tema tan controvertido como la modificación genética animal.
Pero por vivir en la gran Europa del capital y, pese a que ésta sea más reacia a la instauración de este tipo de técnicas, no vamos a dejar de ver estos ‘productos’ en los mercados europeos (odio tratar así a los animales pero es desde esta perspectiva que se los trata al usar este tipo de técnicas con estos fines). De hecho, la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria declaró el año pasado que el consumo de animales clonados y sus productos es seguro para la salud por estar dentro de las normas relativas a la composición nutricional. Dio el visto bueno a su comercialización, en caso de que se quiera realizar, pese a que estos animales tienen el mayor índice de muertes y enfermedades cuando se comparan con los que se reproducen de forma convencional. En verano del 2010 Gran Bretaña admitió que no sabe actualmente cuántas reses puede haber ahora mismo en Reino Unido que sean descendientes de vacas clonadas. Esto salió a la luz porque la FSA (Agencia de Estándares Alimentarios) confirmó que se han detectado dos toros descendientes de vacas clonadas de los que uno, sacrificado en julio de 2009, llegó a la cadena alimentaria.
El maremagnum burocrático y los vacíos legales europeos permiten que haya confusión entre si la carne y leche de animales descendientes de animales clonados necesitan un permiso específico para comercializarse. Este vacío legal hace que se estén ya pasando a la cadena alimentaria este tipo de animales y sus productos de explotación. Aunque a finales de octubre Bruselas ha anunciado que prohíbe clonar animales para destinarlos a alimentación, se ha puesto una moratoria de 5 años, con lo cual puede modificarse esta prohibición cuando pase este tiempo, y no se resuelve el problema porque no especifica qué pasa con los descendientes de animales clonados. La hipocresía de la UE es máxima cuando dicen que toman esta medida apoyándose, además de en el tema de seguridad alimentaria, en el posible sufrimiento del animal derivado de esta técnica pero a la vez, no prohíben la clonación destinada a investigación, conservación de especies o desarrollo de fármacos.

Algunas reflexiones

La biotecnología pretende solucionar los problemas ambientales, de salud y de abastecimiento actuales, o al menos así se vende. Gracias a la religión del siglo XXI, la ciencia, los milagros se venden como solución a todos los problemas actuales. El ateísmo científico, sin tener que implicar posturas primitivistas o antitecnológicas, es imprescindible para el cuestionamiento de la ciencia como religión y para recuperarla dentro de los valores anarquistas.
Mantener una dieta basada en productos animales y que ésta se esté extendiendo en todo el planeta, incluso en países donde la dieta era básicamente de origen vegetal, hace que la demanda de animales para su consumo se esté disparando de forma exponencial. Se calcula que la demanda global de proteína animal alcanzará los 20 millones de toneladas en el 2020, algo inasumible con las actuales técnicas ganaderas y pesqueras. Con lo cual, una de dos, o nos planteamos un cambio de hábitos y un consumo responsable o dejamos que jueguen con nosotrxs los grandes lobbies de las empresas relacionadas con la alimentación con el único objetivo de obtener beneficios a costa de nuestros bolsillos, nuestra salud y el futuro del mundo que nos rodea.
No todo es malo, no todo es negativo. Des de este diario intento dar voz a reflexiones para ser conscientes de aquello que está pasando en nuestra vida sobre un tema que tenemos presente cada día, la comida. El hecho de dar este tipo de información no es para crear visiones apocalípticas y opiniones de que todo es malo y que tienen un efecto rebote de no-actuar por lo enmerdado que está todo. Esta información tiene el objetivo de fomentar el espíritu crítico y así ser conscientes de que podemos tomar decisiones informadas en nuestra alimentación y, lo más importante, que somos nosotrxs lxs que fomentamos o no a que las cosas vayan como van, según si decidimos consumir determinados tipos de alimentos o no y con qué frecuencia. No olvidemos que somos parte de un
sistema económico que se rige por el beneficio y que si se está expandiendo esta industria es porque nosotrxs lo permitimos y fomentamos. No soy de la opinión de que la tecnología sea negativa, pero sí que es importante para mí las consideraciones éticas de qué es lo que se está desarrollando y en manos de quien está esta tecnología. Si el objetivo es producir beneficios a corto plazo para unos pocos, tal como están mostrando que es en realidad, el objetivo de aquellxs que formamos parte de la base social tendría que ser el fomento de los modelos relacionados con soberanía alimentaria que, pudiendo incluir la tecnología, permitirán la repartición de los recursos alimentarios entre todxs y el respeto al mundo en el que vivimos, que permitirá a su vez un modelo de alimentación sostenible.

(1) Un animal clonado es una ‘copia’ de otro animal. Se
‘crea’ sin necesidad de apareamiento entre animales,
usando el material genético del animal que queremos
clonar: el más fuerte, más grande, más productivo...
pero también son animales que desarrollan más
enfermedades y mueren más jóvenes comparados con
su ‘molde’ original.

(2) Un animal transgénico es aquel al que se le
modifica su material genético mediante la inserción
de un gen. Esto quiere decir que se le inserta un trozo
de ‘instrucción’ genética que el animal no posee y se le
añade de forma artificial. Por ejemplo, a un salmón se
le puede insertar un gen relacionado con el color rojo
del tomate que hace que el resultado sea un salmón
transgénico con la carne más rosada que lo hace más
apetecible y por tanto más rentable comercialmente.

(3) FDA son las siglas de Food and Drug Administration,
la agencia que regula la comercialización y seguridad
de los alimentos en EEUU. Además también regula la
comercialización de fármacos y cosméticos.


sábado, agosto 6

Entrevista a Jorge Riechmann


Jorge Riechmann Fernández (Madrid, 24 de marzo de 1962), poeta, traductor, sociólogo, ecologista español. Autor relacionado con el grupo de poetas de la poesía de la conciencia.

¿El apocalipsis ya está aquí?

Podríamos hablar, en cierto sentido, de apocalipsis inmanente: aquel a que se ve sometida la vida humana bajo el imperio de la mercancía. Pero sí que podemos sentirnos bastante seguros –con todas las garantías científicas posibles— de algo terrible: estamos en la cuenta atrás. En lo que hace a la crisis ecológico-social, después de más de cuatro decenios de sensatas advertencias por parte de ecologistas y científicos, estamos en la cuenta atrás.

La relación del poder con la ecología tiene tintes más bien esquizofrénicos y además así también
parece que la vivimos los ciudadanos de a pie, ¿no cree? ¿Nos lo podría ilustrar con algún ejemplo?


Hace apenas unos días conversaba con una mujer a quien acababa de conocer, en Ronda. Me decía: “Pero si ni siquiera cuando todo el mundo estamos de acuerdo en algo, como por ejemplo salvar la selva amazónica, logramos nada...” Me quedé pasmado (nunca dejade sorprenderme una posición así, aunque sea absolutamente mayoritaria en una sociedad como la nuestra): ella creía, de buena fe, que en España todo el mundo deseaba detener esa destrucción. En la buena conciencia imaginaria de las españolas y españoles, quizá: pero si atendemos a las conductas (y no a las representaciones
imaginarias), casi todo en nuestra manera de vivir delata el impulso contrario, el de empujar esa destrucción hacia el límite. La madera tropical de los muebles de jardín españoles, la soja para los pien sos de nuestra industria cárnica, y los beneficios de nuestros grandes bancos dependen de la destrucción de esas selvas (y de casi todos los ecosistemas del planeta).

Profesor Riechmann, en realidad, ¿queremos despertarnos al ecocidio o es preferible seguir confiando en el primo de Rajoy? No me negará que la segunda opción es mucho más tranquilizadora...

Colectivamente funcionamos como sonámbulos, qué duda cabe. La fuga digital (el mundo de internet, los videojuegos, el entertainment electrónico) abre además inmensas posibilidades de evasión, que nuestros padres y abuelos desconocían. Pero la realidad, terca, sigue ahí: no podemos almorzar bits en vez de pan con aceite, quienes nos prometen la inmortalidad tendrán una mala muerte, y seguir los consejos del primo de Rajoy a la postre nos arruina la vida.

Según los datos que maneja en su libro, vamos al abismo a toda máquina y además cantando alegremente... ¿Cómo es posible que esto pueda ser aceptado sin más ni más?

Creo que una parte importante de la explicación tiene que ver con un concepto venerable, el de servidumbre voluntaria (un jovenzuelo llamado Étienne de la Boétie ya lo indicó hace medio milenio); otra porción con otro concepto notable, el de nihilismo. Como ya sé que usted me ha leído a mí (La habitación de Pascal), le recomiendo otra lectura: Capitalismo y nihilismo de Santiago Alba Rico, en Akal.

No hemos aprendido nada... o tal vez sabemos demasiado y de lo que se trata es de no renunciar
a nada, como decía George Bush padre cuando blaba de que “nuestro estilo de vida es innegociable".


No se puede anular la ley de la gravedad por un acto de voluntad, mal que le pese a nuestra voluntarista cultura.

¿Qué puede la poesía contra la publicidad mercantilista del "no te conformes con menos" o la propaganda política del “vamos a más"?

Puede seguir siendo fiel a la belleza y la verdad, sin reprimir la dimensión trágica de la condición humana.

Profesor Riechmann, cuando se salta desde la dominación y la servidumbre ¿a dónde se cae?

Bueno, si uno tiene la suerte de caer de pie y logra escapar a terreno provisionalmente seguro, se le ofrece una formidable perspectiva: todas las luchas, y muy pocas expectativas de vencer. Eso sí, buscando los lugares adecuados puede uno encontrarse militando en buena compañía. Y –como decía Manuel Sacristán hace ya muchos años: justo este verano se cumplen 25 de su muerte-, si uno resulta derrotado, por lo menos deberíamos tratar de ser derrotados con buen humor.

¿Qué ha aprendido Jorge Riechmann en estos últimos treinta años? ¿Y en los últimos treinta días?

Esta mañana vi una mariposa muy bella.

Jorge Riechmann ha obtenido los siguientes premios de poesía: Hiperión (1987) por Cántico de la erosión (ex aequo con Miguel Casado) , "Feria del Libro de Madrid “Parque del Buen Retiro" (1993), nacional "Villafranca del Bierzo" (1996), Premio Jaén (1997), Internacional Gabriel Celaya (2000)y Stendhal de traducción (2000). Dirige, junto con José María Parreño, la colección de poesía Hoja por ojo en la editorial valenciana Germanía. Traduce literatura francesa y alemana.

¿PERO QUÉ DICE EL ANHELO?

Siguiendo el hilo tenue
del anhelo que enhebra
esto y aquello con sus variaciones,
el molusco y la justicia, el beso
con el borde del escarnio, la luz con la otra luz,
el anhelo que tira suavísimo
de lo que existe hacia lo otro, ese hilo
no se rompe, se pierde tantas veces
pero nunca se rompe: no sirve
para salir del laberinto
si para repartir la harina de las estrellas.

Jorge Riechmann, 1999.

Entre la cantera y el jardín

Entre la cantera y el jardín se compone de 17 ensayos que indagan en la conciencia ecológica del presente. La literatura científica lleva más de cuarenta años probando la amplitud del desastre ecológico y social, pero nuestros modos de producir y consumir hacen oídos sordos de todas las alarmas. Ante ello, el investigador y poeta intenta comprender el porqué de tanta inacción y cuáles son las posibles vías que nos saquen del letargo y nos permitanluchar por un mundo que nos haga mejores.
Hoy, mientras el ecocidio continúa, mercenarios con ametralladoras y fusiles de asalto viajan en los atuneros españoles para que podamos seguir expoliando lejanos caladeros y las latas de atún en aceite lleguen sin trabas a los supermercados... Mantenemos un modelo de desarrollo insostenible (casi huelga decirlo) y basado en la exportación de daño. ¿Seremos capaces de despertarnos? ¿Y quién podría ayudarnos? ¿Acaso el poeta? ¿El ensayista? ¿El profesor de filosofía? Llevamos treinta años de hablar, hablar, hablar; y no hacer nada. Narcotizados, sonámbulos, presos los más en su ceguera voluntaria, como si nada hubiésemos aprendido de los siglos pasados. Treinta años sugiriendo que «menos es más»; treinta años leyendo en las pantallas y escuchando en los altavoces «no te conformes con menos».
Pero no nos concentraremos en las fantasías del Armaggedón final sino en la omnipresencia del apocalipsis cotidiano. El daño a la biosfera y el socavamiento de la autonomía del ser humano se están produciendo ahora; el trabajo de los poderes económico-políticos contra las alternativas que nos salvarían está teniendo lugar ahora. El momento de la verdad es ahora. Autoexpropiación para arrancarnos a nosotros mismos de los lazos de dominación y servidumbre.
Frente a la teología del mercado y la líbido de los grandes almacenes, el sueño de una sociedad en la que los ecologistas, los comunistas y los pacifistas ya no sean necesarios. Desprendernos de ventajas y dejar de ser verdugos. Porque todo esto es posible, sí, cambiando las relaciones sociales.

Entrevista realizada por Antonio Orihuela

miércoles, agosto 3

Ibsen y los anarquistas


Estos días, en el Teatro Fernán Gómez de Madrid, se ha estrenado un nuevo montaje de la obra de Ibsen Casa de muñecas. En mi opinión, se trata de una representación más que cuestionable en la que lastran el, ya de por sí, débil conjunto unas interpretaciones muy flojas, y solo adquiere algo de fuerza en la parte final gracias a la fuerza del texto. El dramaturgo y poeta noruego, antes de que se pusiera de moda en España, ya fue apreciado por lo anarquistas debido a que encontraban en su obra muchos elementos con los que se identificaban. En la imprescindible obra de Lily Litvak, Musa libertaria, se afirma que los ácratas consideraron el teatro, como parte del arte y la cultura, como portador de mensajes y un medio para comunicarse directamente con el pueblo. Esta consideración del teatro como un instrumento social y transformador, expresión crítica de la realidad y capaz de resolver sus problemas, llevaría al pueblo a una identificación con la escena que jamás alcanzaría una intensidad mayor que con los anarquistas. Si el teatro poseía ya una base popular, los libertarios se esforzaron en ampliarla. Buscando siempre un público entre la clase oprimida que se identificara con las reivindicaciones mostradas, las representaciones se acompañaban de todo tipo de actividades paralelas en las que se pudiera interactuar, y convertir así el teatro en jornadas dinámicas y recíprocas: publicaciones, conferencias, discusiones, música... Estas actividades recogían la idea del teatro del anarquista francés Jean Grave, el cual apostaba por grupos creadores libremente asociados, que darían lugar a una estética libertaria enfrentada a las representaciones profesionales y comerciales. Esta visión de Grave es, a su vez, deudora de sus maestros Kropotkin, y su consideración de agrupaciones creadoras, y Wagner. Se dieron también numerosos trabajos de estética y sociología teatral, bibliotecas que publicaban obras teóricas y ediciones baratas de autores como Ibsen, así como publicaciones especializadas casi de forma exclusiva en el teatro.

Una de estas publicaciones fue Avenir, cuyo primer número apareció en marzo de 1905, dirigida por Felip Cortiella. Años antes, Cortiella había fundado un grupo teatral en Barcelona, que representó Casa de muñecas en castellano y por primera vez en España. A pesar de la indiferencia de la clase media, los obreros la aclamaron con entusiasmo. Como subraya Litvak, esta introducción de Ibsen en España se produjo antes de la labor ibseniana del dramaturgo y empresario Adrià Gual en el Teatro Intim y, como he dicho anteriormente, antes de que el autor noruego estuviera de moda. Por ello, hay que decir que el anarquista Cortiella es el auténtico promotor de Henrik Ibsen como dramaturgo social. En 1903, Cortiella, junto a sus compañeros Joan Casanova y Pere Ferrets, funda el Centro Fraternal de Cultura, en el que se reunía lo más avanzado del movimiento obrero. Se organizaban jornadas musicales, conferencias científicas y artísticas, representaciones teatrales, se creaban grupos de afinidad con las consecuentes excursiones, y se formó una importante biblioteca en la que se prestaban libros a los trabajadores. El Centro tenía como objetivo primordial la formación cultural, y la propaganda ideológica era una lógica consecuencia de ello. Precisamente, uno de los nombres de las agrupaciones teatrales creadas en este movimiento obrero y cultural de carácter libertario recibió el nombre de Ibsen. De uno de sus fundadores, Albano Rosell, son las palabras según las cuales la idea era hacer "un teatro nuestro de ideas, de vibración social, de combate y de lucha". La agrupación Ibsen comenzó su actividad con la representación de una obra del autor noruego, Espectres. Naturalmente, a todas estas personas, junto a las inquietudes culturales y formación de los obreros, les preocupaba igualmente la educación de la infancia. Es el caso de Rosell, el cual combinaba sus actividades teatrales con su labor de profesor en la Escuela Moderna de Ferrer, haciéndose cargo en 1904 de la Escuela Moderna de Mogat, fundando en 1906, en Sabadell, la Escuela Integral y la revista Cultura. Entre su numerosa obra escrita, destaca El teatro y la infancia, en la que considera el teatro como uno de los mejores medios, además de divulgación artística, de propaganda, de crítica y de orientación ética y filosófica para los chavales; del mismo modo, lamenta en este texto teórico la mercantilización de la actividad teatral y se esfuerza en liberarlo de toda especulación empresarial.


Por lo tanto, entre los autores preferidos por los anarquistas, con obras que reflejaran los problemas sociales y modernos, estaba Ibsen y, en concreto, su obra Un enemigo del pueblo. Hay que decir que, a pesar de ser el anarquismo una de las corrientes decimonónicas del socialismo, si esta obra gustó a los libertarios fue por su defensa del individuo, el cual desea realizarse plenamente al margen de toda coacción social. Estamos hablando de unas ideas que extienden su concepción de la libertad a lo social, por supuesto, pero siempre sin imposición alguna, y esa defensa conjunta del individuo y de la justicia social resulta encomiable. Muy importante resulta esta cuestión para recordar a los que quieran reducir a Ibsen a una mera lectura liberal. Un enemigo del pueblo se estrena en 1893 por parte de la compañía Tatau en el Novedades de Barcelona, un hecho considerado crucial para el nacimiento del teatro obrero. Frente a la extrañeza de la prensa burguesa del éxito de esta obra entre los trabajadores, en la que el protagonista arremete contra el populacho y cuestiona el sufragio universal, la crítica de El productor vendría a poner las cosas en su sitio. El periódico anarquista publicó la siguiente reseña: "Ibsen es el Hércules que arremete decidido contra todas las farsas, todos los convencionalismos, todos los bastardos intereses, levantando sobre tanta ruina el mundo nuevo, con su moral y justicia y ciencia positivas". Se denuncia así la visión burguesa, interesada y reduccionista, y se alaba al autor noruego con su filosofía, su ciencia y su calidad escénica, la sencillez y naturalidad de su dramaturgia, y la justeza y realismo de sus protagonistas, "porque son reales, y son simbólicos, porque cada tipo representa toda una clase, toda una institución". Se critica, en definitiva, "el arte por el arte" y se reclama un mayor horizonte para la representación teatral, tal y como realiza Ibsen, con el que los anarquistas se identificaron plenamente: "Todo cuanto los anarquistas hemos dicho, aparece en la obra, a veces con una sola y elocuentísima frase... Por eso resultó la producción para nosotros un verdadero acontecimiento, un acto de los nuestros, con la gran cualidad de revestirse con la más bella envoltura artística... así acuden los trabajadores al Novedades a sostener la obra con sus aplausos contra el significativo mutismo". Las representaciones siguientes de Un enemigo del pueblo, por parte de otras compañias, serían siempre una acontecimiento para la clase obrera. Incluso en Madrid, y a pesar de alteraciones en la obra original y la indiferencia entre la clase media, fue siempre apoyada por los trabajadores. En La Idea libre, otra publicación ácrata, se publicó un artículo llamado "El anarquismo en el teatro", en el que se mencionaba a Ibsen como prueba de que grandes autores se acercan, de forma consciente o inconsciente, al ideal ácrata.

Junto a Un enemigo del pueblo, no dejaron de tener éxito entre los obreros otras obras del noruego como Rosmersholm, Spectres y la propia Casa de muñecas. Esta obra fue representada por Cortiella en el Teatro Circo Español con el título de Nora (nombre de la protagonista), y a la entrada se regalaba al público un número de Teatro social, con el retrato y la biografía de Ibsen, un estudio del drama y un artículo sobre el teatro y los anarquistas. Todo eran encomiables y productivos esfuerzos por poner el medio al servicio de la emancipación social. Incluso, las obras de Ibsen ofrecidas en teatros burgueses eran reseñadas en los medios libertarios, ya que se consideraba lógico el éxito de la obra del noruego, al igual que lo es la imposición de una verdad científica. Se consideraba que un teatro sociológico ayudaba también a comprender el progreso científico y lógico de la sociedad hacia una organización más perfecta. Es por eso que tanto gustaba Ibsen, tal y como publicó Teatro social: "ha despertado inteligencias, ha emancipado, ha hecho más: ha creado un teatro sociológico", Ibsen dejaba al espectador "el campo libre del dogmatismo para que pueda representar a su antojo el proceso evolutivo de la sociedad futura". Tal y como sostiene Litvak, esta actitud científica de los libertarios no les hace subordinarse al naturalismo, a la la reproducción fotográfica y verídica del mundo, ni caer en un rígido realismo. Aunque los anarquistas se consideraban a sí mismo realistas, en su labor existe siempre un propósito social, un deseo de expresar el ideal subyacente en la realidad.

Extraído de Tierra y Libertad